PORQUÉ NO CONVIENE DESAHOGARSE

PORQUÉ NO CONVIENE DESAHOGARSE

Escrito por Evolucion Consciente

Las publicaciones son de autores muy interesantes que hemos leído y que compartimos para el beneficio de muchas personas que requieren ayuda. Si tu eres uno de esos autores y consideras que tu articulo no debe estar en nuestro blog, por favor escríbenos y lo retiraremos sin problemas

31/03/2016

Sin duda alguna todos conocemos bien, en mayor o menor medida, la fuerza que tiene la Ira.

Al tratarse de una emoción que nos moviliza, nuestro cuerpo segrega hormonas, activa músculos, glándulas y demás para que estemos con toda nuestra potencia para actuar.

Pero salvo que nos encontremos en una situación real de vida o mas allá, la verdad es que resulta desproporcionada tal activación y no sabemos muy bien como deshacernos de ella.

Hay terapeutas, que nos aconsejan expresar nuestra ira para sentirnos mejor. Nos sugieren que digamos o hagamos cosas para sacar la cólera que sentimos, como coger un palo y golpear un neumático, o dar un portazo con todas nuestras fuerzas. O también, golpear una almohada.

Estos terapeutas creen que es el método para eliminar la energía de la ira que hay en nosotros; y lo flaman, «desahogarse».

Cuando tu habitación está llena de humo, quieres ventilarla para que salga el humo. La ira es una especie de humo, una energía que te hace sufrir. Cuando el humo de la ira surge, quieres abrir la puerta y encender el ventilador para que salga la ira. Así que te desahogas golpeando una piedra o un árbol con un palo, o aporreando una almohada. Se ha visto a mucha gente hacerlo.

Pero en realidad; con éste método, sólo te sientes mejor temporalmente. Y además, los efectos que tiene son muy perjudiciales, porque te harán sufrir mucho más.

La ira requiere energía para manifestarse. Cuando intentas descargarla golpeando algo o aporreando la almohada con todas tus fuerzas; al cabo de media hora, estarás agotado. Y como estarás hecho polvo, no te quedará más energía para alimentar la ira que sientes y pensarás que ha desaparecido; pero no es cierto, lo que ocurre es que estás demasiado cansado para estar ofuscado.

La ira que sientes, surge de las raíces de la ira que hay en ti. Las raíces de la ira se arraigan en la ignorancia, en las percepciones erróneas y en la falta de comprensión y compasión. Cuando das rienda suelta a la ira, simplemente estás abriendo la energía que alimenta la ira en ti, pero sus raíces siguen estando ahí; y al expresar la ira de este modo, las fortaleces. Éste es el peligro que comporta desahogarse.

En el New York Times, del 9 de marzo de 1999, apareció un artículo sobre la ira titulado: «Descargar la agresividad no es aconsejable».

Según tal artículo, los psicólogos sociales habían llevado a cabo numerosas investigaciones y habían sacado la conclusión, de que intentar descargar la ira y la agresividad golpeando una almohada y haciendo cosas parecidas no ayudaba en absoluto. En realidad, empeoraba la situación.

Cuando aporreas una almohada; en vez de calmar y disminuir la ira que sientes, la estás fortaleciendo. Si lo haces a diario, la semilla de la ira que hay en ti crecerá cada día. Y algún día; cuando veas a la persona que te ha hecho enfurecer, tal vez practiques lo que has estado ensayando. La golpearás y acabarás en la cárcel…

Por eso, manejar tu agresividad golpeando una almohada o desahogándote no sirve para nada; y en sí, es una práctica peligrosa.

En realidad, no estás desahogando la energía de la ira, porque la ira no desaparece de tu organismo. Descargar la cólera que sentimos es una práctica basada en la ignorancia. Cuando imaginas que la almohada es el objeto odiado y la golpeas, estás manifestando ignorancia e ira.

En lugar de disminuir la violencia y la ira que experimentas, te enojas y enfureces más. Una serie de terapeutas han confirmado que la práctica de desahogar la ira, es peligrosa.

Me explicaron que dejaron de aconsejar a sus pacientes que la hicieran, porque después de haberse desahogado golpeando una almohada estaban cansados, por eso se sentían mejor. Pero una vez descansaban y comían un poco; si alguien llegaba y regaba las semillas de la ira que había en ellos, se enfurecían más que antes, porque habían estado alimentando las raíces de su ira al manifestarla.

Lo mejor es buscar la raíz de nuestra Ira, utilizar técnicas diarias de relajación o meditación ( como un hábito en nuestra vida, no como una «tirita» en el momento en que la Ira se ha adueñado de ti) y trabajar en nuestras creencias y en los pensamientos que nos hacen desencadenar la Ira.

Para conocer realmente qué aspectos de ti está mostrándote tu Ira y cómo erradicar esa respuesta de tu repertorio de conductas te aconsejo visitar este enlace

Más de este blog…

2 Comentarios

  1. RUBEN

    tengo 15 años de no acudir al medico….los mismos que practico meditacion de movimiento..donde en sus etapas saco todo el enojo, ira y cualquier emocion contenida… ! tal vez no me lleve a una solucion de raiz…pero he aprendido a ser mas sensible con mi vida y mis semejantes…. desde mi opinion..el Darle respaldo a un periodico y psicologos GRINGOS…hacerca de las emociones es seguirle el camino de la MEDICACION e intereses economicos…eso me parace una
    actitud mas IGNORANTE..
    Saludos

    Responder

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *