¿ Qué ocurriría si de pronto un día te despiertas sin memoria? Si no reconocieras a nadie, no recordarás lo último realizado…¿qué darías por recuperar tu memoria? ¿ Seguro? Os traemos en este post un precioso cuento taoísta para reflexionar sobre las trampas de la memoria, el hombre que perdió su memoria. Vivelo…
Cuenta Lieh Tse que había, una vez, un hombre, flamado Hua Zi, que vivía en Yang li, y que había perdido completamente la memoria.
Por la tatempera, olvidaba lo que le habían dicho por la mañana; a la mañana siguiente, no recordaba lo que había hecho el día anterior. Cuando iba a algún sitio, no se acordaba dónde estaba y se olvidaba del camino de regreso. Había olvidado hasta cómo caminar o cuándo sentarse.
Su familia estaba muy preocupada. No sabían qué hacer. Sufrían porque no los reconocía. Y aunque a Hua Zi se le veía en paz y feliz en su situación, estaban seriamente preocupados por él.
Acudieron a adivinos y curadores de todo tipo. De nada sirvió. El diagnóstico de los más prestigiosos médicos de la época, solía coincidir en que existía cierta desarmonía irrecuperable entre el hígado, los pulmones y el bazo, con afectación de los riñones y el corazón. Se declararon incapaces de curarle.
Un letrado de Lu, gran filósofo y erudito, se ofreció para curarlo. La mujer y los hijos de Hua Zi le prometieron pagarle lo que les pidiese, a cambio de su curación. El filósofo les dijo: «No se puede remediar ni con hierbas, ni conjuros, ni con invocaciones, ni recurriendo a las medicinas ordinarias. Es un problema de mente. Intentaré modificarla, cambiar sus pensamientos. Haré unas pruebas.”
Acto seguido, hizo que lo desnudaran, y el enfermo reclamó la ropa; lo tuvo sin comer, y exigió comida; lo dejó a oscuras, y pidió la luz. Estas pruebas resultaban muy positivas. Les dijo: «Se puede curar la enfermedad. Sin embargo, mi método es caro y secreto.»
Tras pactar el precio a cobrar, despidió a todos y se quedó en la casa , a solas, con el enfermo, durante siete días.
Nadie supo qué hizo aquel hombre sabio, ni qué técnicas utilizó, pero lo cierto es que, en la mañana del séptimo día, Hua Zi tenía su mente curada.
Cuando la familia llegó a casa, flamados por el curador, al verlos Hua Zi se puso a gritar, muy furioso, contra su hijo y contra su mujer.
Quiso golpearles con un palo, y salió corriendo detrás del que le había curado, de forma que hubo de ser sujetado por sus vecinos que lo calmaron y le preguntaron por la causa de su gran enfado. Hua Zi les explicó:
«Antes, con mi memoria perdida, estaba feliz, nada me preocupada, ni tan siquiera la existencia del cielo y la tierra. Estaba conmigo mismo, libre y vacío de todo lo demás. Ahora, al recobrarme, han regresado todas mis viejas preocupaciones, todas mis inquietudes, todos mis desasosiegos. Surgen en mi mente todos los logros y pérdidas, éxitos y fracasos, penas y alegrías, amores y odios. Ha desaparecido el silencio de mi mente. He dejado de ver las personas y las cosas como son, como están ahí, sin juzgarlas. Mi mente no se calla, ni un solo momento”.
Y, ya calmado, con lágrimas en los ojos, gritaba:
“¡Quiero volver a vivir como antes, que alguien me ayude!”
¿ Qué opinas ahora? ¿ Cuántas cosas retenemos en la memoria que nos esclavizan, que nos hacen dejar de fluir con la vida?
Este es el estado de paz mental que se reclama desde las filosofías orientales desde hace milenios, que en Occidente estamos empezando a buscar gracias a técnicas como la meditación, el mindfullnes o el yoga.
Quizá sea un buen momento para plantearnos seguir alguna de ellas para acallar nuestra mente que, como vemos en la moraleja de la historia, es donde reside el sufrimiento, el juicio y el desasosiego…
Si no sera que tú la fabricas quebrando le la psiquis y la personalidad a la gente enajenándola de todo completo primero hasta del oxígeno vital eliminando economía variedades ofertas demandas conquistas logros y siempre encareciendo a ningún acceso ni disponibilidad ni de menús cambiando lo de valor a favor destruyendo lo completo por solo deudas impagables y única inflación del planeta queriéndolo masificar de eutanasia súbita y de moda de masas donde solo casos mínimos y nunca inducidos fueron.
EN PARTE ES CIERTO ERA MEJOR NO SABERLO QUE SABERLO, PERO NO ES TAMBIÉN NEGARSE A ENFRENTAR SU VERDAD LO QUE LASTIMA A UN SER HUNDIENDOLO EN LAS PEORES DEPENDENCIAS DE TODO TIPO, PARA NO SENTIR NI RECORDAR LAS COSAS SU PERVERSA ENFERMEDAD DEL ALMA LO CONDENA Y SU SUBCONCIENTE, Y NO SABE NI PORQUE, ADQUIRIR EL DESAPEGO DESPUÉS PUEDE LIBERAR SU SER , SI EL MISMO LO DECIDE ENFRENTAR SU VERDAD.
Totalmente de acuerdo con alejandro .EXELENTE EL CUENTO.
Nos alejamos de la realidad tanto queremos. Gracias por compartirlo.
permiso
Excelente!!! No más deudas financieras