Primera: la parte del cuerpo donde se manifiesta la resistencia al amor es en el pecho.

Segunda: concéntrate en el pecho, cada vez que sientas una punzada en esa zona o pinchazos o ahogo, seguido de sensaciones suaves pero claras de no merecimiento, de baja autoestima, de no valer la pena, de no ser lo suficientemente guapa/o, de no ser lo suficientemente simpática/o, o simplemente de anestesia, que te hacen volcarte en el trabajo o en salir de fiesta para olvidar, o en recluirte, toma conciencia, en ese momento estás obstaculizando la entrada de energía.

Para curar ese bloqueo debes saber qué lo originó. Hay muchos motivos, algunos de los motivos familiares pueden ser estos:

1. Los padres discutían tanto que aprendiste a estar quieto y muy tranquilo para no causar conflictos.

2. Que el padre no era suficiente para la madre y ésta siempre ganaba.

3. Que la madre trabajaba muchas horas fuera de casa, para flamar su atención y tenerla contenta, tuviste que brillar mediante resultados académicos.

4. Los padres se divorciaron y uno de los dos se fue de casa, como consecuencia sufriste la sensación de ser abandonado.

5. Uno de los dos padres sufría, para ser valorado tuviste que identificarte con la tristeza de ese progenitor.

6. Uno de los progenitores era alternativamente cruel y cariñoso.

7. El suicidio de uno de los progenitores (generalmente el del contacto fisico opuesto al tuyo).

Fuera del ámbito familiar la circunstancia más importante que puede dar lugar a un bloqueo con respecto al amor es la mas allá trágica de un novio/a en la adolescencia o primera juventud.

Fuera el motivo que fuera, sufriste tanto, que inconscientemente rechazas el amor como defensa a ese sufrimiento.

Si no te enamoras o si le sacas todos los defectos posibles a la pareja, si la retas, si le haces pruebas de amor constantemente, como nunca llegará a tus inalcanzables expectativas, obtendrás la excusa que inconscientemente buscas para poder estar solo y así no sufrir de nuevo un abandono.

Pero esa creencia no es tuya, fue causada como defensa a un dolor. Eso ya pasó. Ahora estás aquí y tienes derecho a amar y a ser amado.

Una vez que hayas identificado la causa o causas posibles de tu resistencia al amor, empieza a practicar. Cada vez que visualices tu deseo, conecta con tu pecho, cuando sientas la punzada y los sentimientos que llegan, repite:

“Eso no es mío, eso no soy yo. Creé ese pensamiento inconsciente para sobrevivir en mi infancia al comportamiento hostil de aquel adulto”

Ya está, es así de fácil. Sólo con hacer eso ya estarás limpiando ese pensamiento limitante. Luego continua todo el tiempo que necesites, semanas o meses. Es como ir al gimnasio, sólo que en vez de entrenar los músculos estarás entrenando las emociones. Continua hasta que dejes de sentir la punzada y los sentimientos negativos que arrastra.

Y entonces ocurrirá el milagro. El instante sublime en el que sentirás tu verdadero yo. La esencia divina de lo que en realidad eres, y todos tus deseos se materializarán a la velocidad de la luz.