No hay mayor verdad que la de que en este mundo tenemos dos opciones: Aprender desde el dolor o desde el Amor. Refranes como » El hombre es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra» o « la letra con sangre entra», nos dan idea de que en un gran número de ocasiones elegimos aprender a través del dolor. En este post te descubrimos el otro camino, el del corazón, descubriéndote los 8 hábitos de las personas que aprenden sin dolor.
No importa que paradigma te rija, no importa si piensas que la vida es sólo un período en el que nuestra Alma viene a la Tierra a seguir evolucionando, a aprender lo que requiere para ascender, o si piensas que esto es todo lo que hay, en ambas opciones o aprendes de las circunstancias o estás condenado a repetirlas.
Porque no dudes que las circunstancias de las que tienes que aprender se van a repetir a lo largo del camino, cada vez de forma más evidente y potente, porque la vida es cuestión de ensayo y error.
La forma en la que adquieras este aprendizaje será determinante para tu calidad de vida.
Si eliges, y digo bien, eliges, porque aunque no lo creas depende de ti, aprender desde el sufrimiento, será este el que guíe tu camino, será a través de las experiencias traumáticas repetidas una y otra vez como aprenderás a superar tu aprendizaje.
Si eliges aprender desde el Amor, todo será más rápido, transmutarás el dolor en Amor, en comprensión, en gratitud.
Ya….¿ y eso cómo se hace? En primer lugar eligiendo el camino del corazón, comprometiéndote con él y cambiando la forma en la que gestionas tus aprendizajes.
Estos son los 8 hábitos de las personas que aprenden a través del Amor:
1. Creen es sus propios recursos. Saben que la vida no siempre es fácil, pero tienen la certeza de que cuentan con los recursos suficientes para salir de cualquier situación, no se dejan vencer por el «pobre de mi» por adversas que sean las circunstancias.
2. No ceden su poder personal. Y esta es la clave para mantener vivo el primer hábito. Si nos acostumbramos a hacer cesiones de nuestro poder personal, de nuestra capacidad de reacción, terminamos perdiendo la fe en nuestros propios recursos. Nos debilitamos si no llevamos puesto el amuleto de la suerte, o si no nos aplauden en nuestras decisiones, o nuestras figuras de referencia piensan diferente a nosotros.
3. No conocen la Culpa. Obran a través del corazón y asumen las consecuencias de sus actos por lo que la culpa no tiene cabida. porque nunca hubo intención alguna de causar ningún daño. De la misma manera nunca culpan a los demás o a las circunstancias de lo que a ellos les ocurre, simplemente aprenden de ello.
4. Muestran un gran sentido del humor. Son capaces de reírse de si mismos, de sus egos enfurruñados… Cuando reciben una metafórica bofetada en el Ego, aunque les escueza, rápidamente detectan que es justo ahí donde duele, en el Ego, sonríen, porque saben que como decían las madres cuando te curaban una perjudicada, si escuece es que está curando… Así que el ego sólo les muestra la perjudicada, y ellos con una sonrisa se dedican a curar.
5. No se toman las cosas como algo personal. Entienden que cada persona tiene sus propios aprendizajes, su libertad de acción, practican el » eso es suyo», y se dedican a actuar desde el corazón tengan a quien tengan enfrente. Poseen un alto grado de empatía que les permite ponerse en la piel del otro para descubrir sus miedos ocultos, lo que les lleva a actuar de esa manera y no se dejan perjudicar por ello.
6. Muestran humildad en el aprendizaje. Ante un aprendizaje, por duro que sea, se muestran agradecidos de la oportunidad de trascenderse a si mismos y a las circunstancias, agradecidos a los espejos que les muestran lo que tienen que curar, a los que les descubren los poderosos recursos con los que cuentan y que de otra forma jamás descubrirían en un mundo en el que todo fuera sencillo.
7. Sienten que forman parte de algo que les trasciende. Bien sea la familia, la sociedad, la divinidad o el Universo. Se saben parte de algo más grande, de un sistema mayor que les da la oportunidad de crecer en Amor, porque sólo teniendo algo a lo que Amar, a lo que pertenecer, el esfuerzo merece la pena. Es en la interacción donde podemos practicar el Amor.
8. Practican el Amor Incondicional. Por si mismos, por el otro, por los aciertos, por los errores, por lo grande y por lo pequeño, por la luz y la oscuridad, porque en este mundo de dualidad todo son oportunidades de crecimiento, todo nos ayuda a potenciar las maravillas del amor incondicional, aun más cuanto más dificil nos resulte a priori amarlo.
La VIDA nos invita cada día a viver de cada aprendizaje, eres tú y sólo tú quien decide como quiere aprender.
Namasté
Jorgelina Orellano
MUY INTERESANTE
Namasté Swaha, hari OM tat sat, om ahum benza guru pemma siddhi´s hum.
Gracias gracias gracias ॐ