En la actualidad, todos somos conscientes de la época de evolución y de conciencia que está atravesando la humanidad, ya sea a nivel de bienestar, personal, de pareja, familiar, social, de instituciones, de países, incluso de la propia Tierra. Esto es debido entre otras causas, a que el campo energético del Planeta en su propia evolución ha subido de vibración más de lo que el ser humano está preparado para soportar, encontrándose, le guste o no, en la necesidad de evolucionar energéticamente.

En esta etapa de evolución planetaria son necesarias herramientas y prácticas energéticas nuevas que ayuden al ser humano a realizar los cambios necesarios para adaptarse a esta nueva frecuencia vibratoria. Para ello está llegando al planeta una nueva energía de alta vibración, flamada Energía Suprema. Esta energía se ha recibido mediante canalización junto con prácticas y terapias energéticas nuevas y efectivas más potentes para elevar nuestro nivel de conciencia y así poder crear bienestar, paz interna, equilibrio y alegría, y vivir en la prosperidad y el amor.

¿Qué es la energía suprema?
La Energía Suprema, es una energía natural, limpia y pura de alta vibración, que viene directamente del Cielo de Luz, para ayudar a evolucionar al ser humano. Tiene la capacidad de sanar, limpiar y trasformar todas las energías negativas del cuerpo, de la mente, del alma, del espíritu y del campo energético humano.

Para poder adaptarnos a esta nueva etapa es deseable recibir la conexión con esta energía para ir logrando cada vez mayor conciencia e iluminación para poder realizar la transformación que nos permitirá vivir en la Nueva Madre Tierra. El planeta asciende de vibración y el ser humano debe ascender también, e ir atravesando diversas etapas energéticas para despertar a la Nueva Conciencia.

Esta nueva energía está disponible actualmente para todos los seres humanos. Es posible iniciarse en esta nueva vibración mediante cursos, talleres, retiros y prácticas energéticas de sanación y conexión. Después de la iniciación en esta energía, la persona sube de vibración, aumenta la conciencia y la claridad al conectarse con su Alma, se armoniza, se equilibra y mejora su bienestar general.

Existen métodos de sanación en la tierra que han ido caducando porque el ser humano ha evolucionado más que ellos y muchos buscadores, terapeutas manuales, energéticos, sanadores se han afectado con las energías negativas de técnicas contaminadas, de sus pacientes, razón por la cual se encuentran agotados, enfermos y estancados en su evolución. Muchos usuarios de terapias energéticas han dejado de ir a sus terapeutas porque se sienten afectados por sus energías negativas, motivo por el cual sería deseable que todos los terapeutas energéticos, manuales, sanitarios, etc., pudieran reciclarse con la Energía Suprema, para tener protección eficiente y realizar sanaciones limpias.

Ha llegado el momento de aprender a distinguir entre energías ya caducas antiguas que hasta ahora han funcionado para la sanación de los seres y las nuevas energías que están bajando de una frecuencia mayor y que son las que se requieren en la actualidad como solución al nuevo reto evolutivo del ser humano que se presenta ahora.

En el universo hay energías negativas y energías positivas, de modo que la energía universal y toda la energía que nos rodea, también perjudica al ser humano, por eso requieremos energías limpias y puras para sanar, limpiar, transformar, recargar y proteger a las personas y los espacios.

Existe un mundo energético, compuesto también por miles de seres energéticos negativos, de diferentes clases, tamaños, y con distintos efectos nocivos, que aprovechan para introducirse en el ser humano como ocupas, se alojan en nuestros órganos y sistemas, se alimentan de nuestra Energía Vital, y nos causan todo tipo de trastornos y disfunciónes físicas. Estos parásitos energéticos también nos pueden llevar a perder el equilibrio mental y emocional, nos crean insomnio, aturdimiento, cansancio, nerviosismo, ansiedad, incluso agresividad. Hay un gran número de personas y niños, sobre todo, que ven, sienten y perciben estas energías.

¿Qué beneficios nos aporta?
Con la Energía Suprema podemos descubrir todos estos parásitos energéticos, limpiarnos, liberarnos de ellos, cargar energéticamente y reparar el espacio que ha sido desequilibrado, transformándose y devolviéndole de nuevo a la bienestar. La mayoría de las veces la causa de una disfunción es energética, es decir una energía negativa que bloquea e impide que llegue la energía vital al órgano o sistema, así que al eliminar la causa, desaparece también el efecto, la disfunción o trastorno.

La Energía Suprema mejora la disfunción, reduce el dolor, la inflamación y los síntomas de cualquier trastorno, ya sea agudo o crónico, es por esto que es de gran ayuda para lograr una buena calidad de vida.

La Energía Suprema permite limpiar y reducir, los estados de ansiedad, irritación, ira, agresividad, pánico, estados de ánimo negativos, archivos negativos del alma, traumas, ayuda a liberr karma, etc., y ayuda a permanecer con paz interior y equilibrio.

Podemos limpiar la energía negativa de cualquier ambiente, ya sea familiar, de trabajo, grupos de meditación, o terapéuticos, equilibrándolos, creando paz y armonía en el espacio y en las personas. En cualquier tipo de terapia que hagamos podemos potenciar tanto las capacidades del terapeuta como los efectos de la misma, conectados con la Energía Suprema, limpiarla y protegernos de terapias y herramientas que no son «limpias».

Muchos de los síntomas y molestias que tenemos, provienen de las ondas electromagnéticas y de los tóxicos de todo tipo que respiramos y tomamos, de medicamentos, etc., limpiarnos de ellos y limpiar lo que consumimos con Energía Suprema, nos ayuda a conservar la bienestar.

Si queremos mantener la bienestar propia y de nuestra familia, es recomendable aprender a distinguir entre energías positivas y negativas y aprender a realizar nuestra higiene energética diaria, del mismo modo que reiniciamos y limpiamos de virus, nuestros equipos informáticos.

La Energía Suprema no tiene contraindicaciones, potencia cualquier tratamiento médico o alternativo y se puede utilizar con toda seguridad con bebés, embarazadas, ancianos y toda persona, sea cual sea la disfunción o situación en que se encuentre.

Clara Alegre y Salvadora Molina