El corazón y la alegría están directamente relacionados con nuestra buena bienestar.

En la medicina china las emociones (como causa de disfunción) son estímulos mentales que alteran la circulación del Qi y agitan la mente (Shen), el alma etérea (Hun) y el alma corpórea (Po), y a través de ellas rompen el equilibrio de los órganos internos y la armonía de Qi y sangre.

Revisando los textos chinos se llega a la conclusión que por una parte el estrés emocional lesiona los órganos internos y, por otra parte la desarmonía de los órganos internos causa desequilibrio emocional. La medicina china suele referirse al estrés emocional como causa “interna” de disfunción y al ambiente como causa “externa” de disfunción.

El espíritu del ciervo se asocia a la energía del fuego, relacionada con la risa y su acción benéfica sobre las funciones cardíacas y digestivas.

El ciervo se caracteriza por la flexibilidad, espontaneidad, agilidad y vivacidad de sus movimientos.
Imitar su espíritu requiere flexibilizar el cuerpo y el espíritu.

El corazón se clasifica en el movimiento básico del fuego que se caracteriza por una energía expansiva que tiende a propagarse con rapidez, la energía calienta y tiende a elevarse, se mueve hacia arriba, es como la flama del fuego.

A nivel físico el corazón regula la sangre y controla los vasos sanguíneos. El corazón emerge en la lengua. El intestino delgado que separa lo puro de lo impuro se asocia al corazón. El pericardio protege al corazón y se asocia con el calentador triple que es un órgano que no tiene equivalencia en anatomía occidental pues tiene una función puramente energética dado que coordina la transformación y el transporte de los fluidos del cuerpo además de regular la función térmica de todo el organismo.

Emocionalmente el corazón está directamente relacionado con la risa, aunque al ser el motor del cuerpo también esté relacionado con el resto de emociones.

Mantener el corazón sano mediante la risa tiene multitud de beneficios.

Relaja todo el cuerpo: Una buena carcajada alivia la tensión física y el estrés, dejando la los músculos completamente relajados durante un buen rato. Sus efectos duran mucho más allá de que la risa termine, hasta 45 más.

Provoca la liberación de endorfinas: Las endorfinas son unas sustancias químicas que hacen que el cuerpo se sienta bien de manera natural y causan una sensación de bienestar general que puede llevar a aliviar el dolor temporalmente.

Protege el corazón: La risa mejora la función de los vasos sanguíneos, mejorando la circulación y aumentando el flujo sanguíneo. Esto puede ayudar a proteger contra un pico al corazón y otros problemas cardiovasculares.

Estimula el sistema inmunológico: La risa disminuye las hormonas del estrés y aumenta las células inmunes y los anticuerpos que combaten la infección, lo que mejora su resistencia a las disfunciónes.

Es beneficiosa para la bienestar mental: La risa permite a las personas añadir alegría y entusiasmo a sus vidas, aliviar la ansiedad y el miedo, aliviar el estrés, mejorar su estado de ánimo y mejorar sus capacidad de recuperación.

Disuelve emociones perturbadoras: No es posible sentirse ansioso, ofuscado o triste mientras se ríe.

Ayuda a relajarse y recargar: Además de reducir el estrés y aumenta la energía. Esto permite mantenerse enfocado y ser más eficiente.

El buen humor cambia la perspectiva: El buen ánimo que se deriva del buen humor permite ver las situación desde una perspectiva más realista y positiva y menos amenazante.

El ejercicio que te indicamos a continuación es efectivo para el fortalecimiento del corazón e intestino delgado.

Posición inicial: Debes estar de pie, firme pero relajando tu cuerpo durante algunos instantes.

Realización:

• Flexiona ligeramente la pierna derecha y estira la pierna izquierda hacia adelante, cargando el peso del cuerpo en la pierna derecha.
• Estira el brazo izquierdo hacia adelante y acompaña el movimiento con el derecho levemente flexionado.
• Con un movimiento circular de las caderas y la cintura, rota los brazos en dirección opuesta a las agujas del reloj. El círculo dibujado por la mano izquierda, dada su ubicación, debe ser más grande que el de la derecha y las articulaciones de los hombros deben permanecer quietas. Repite el movimiento varias veces.

Realiza la secuencia completa pero esta vez, adelantando la pierna y el brazo derecho, mientras que la pierna y el brazo izquierdo se mantienen ligeramente flexionados y rota los brazos, mediante el movimiento de cintura y caderas, en el sentido de las agujas del reloj.

Repite el ejercicio en forma alternada hacia la derecha y hacia la izquierda, varias veces.